¿Cuándo consultar?


De manera preventiva:

  • Para hacer un chequeo osteopático
  • Para prevenir una escoliosis
  • Antes de comenzar un deporte, preparar una competición, mejorar su rendimiento, facilitar la recuperación
  • Para un seguimiento osteopático de la mujer embarazada (antes y después del parto)
  • Para un chequeo osteopático del recién nacido

De manera curativa:

  • Después de un esguince, falso movimiento, desgarro muscular, tendinitis (codo de tenista, etc...), luxación, fractura, larga inmovilización
  • Después de un golpe o una caída sin lesiones evidentes en la radiografía, accidente automovilístico (whiplash), cirugía
  • En caso de dolores cervicales, dorsales, costales, lumbares, de sacro o de cóccix
  • Para una ciática, neuropatía femoral, neuralgia cervico-braquial, síndrome del túnel carpiano
  • Migraña, cefalea
  • Para las enfermedades osteomusculares, dificultades de locomoción
  • En caso de dolores articulares (artrosis, espondilitis, etc...),
  • Para el reflujo gástrico, distensión abdominal, estreñimiento, diarrea, hernia de hiato,  síndrome del intestino irritable
  • En caso de asma, bronquitis repetidas, rinitis, sinusitis, acufenos
  • En periodo de estrés, fatiga, insomnio, depresión

 

El enfoque experto de estas afecciones por un Osteópata no excluye los exámenes y el chequeo médico que se llevaran a cabo previamente.